Desde pequeño era muy tímido cuando se trataba de hablar con personas. Siempre era un miedo que no permitía que las palabras salieran de mi boca. Todo el mundo me decía que debía hacer algo para cambiar eso, porque no era bueno y porque necesitaba hacerlo por mi propio bien, y tenían razón, eso no me ayudaba en nada. Siempre pensé que me quedaría así toda mi vida, porque no veía solución alguna al problema. No encontraba una buena razón para cambiar, me sentía cómodo en mi cerrado y apartado mundo. Era como si no tuviera una sola persona que me comprendiera o que me dijera algo que de verdad me motivara a cambiar. Tenía 14 años cuando escuché sobre Lady Gaga por primera vez. Para ser honesto, pensé que sería una cantante mediocre. Vaya sorpresa que me llevé. Mi prima me motivó a escuchar sus canciones. La primera que escuché fue Poker Face, y me di cuenta de que ya la había escuchando antes, no sé en dónde, pero lo había hecho. Algo en mí se movió con esa canción. Luego vinieron Just Dance y Telephone. Desde ese momento había encontrado una persona que me inspiraba a ser diferente, a cambiar y ser fuerte. Fue tal el cambio en mí que comenzaban a llamarme "loco" en mi colegio. Yo estaba feliz de que me llamaran así porque me sentía diferente y especial. Han pasado tres años desde que escuché "por primera vez" a Lady Gaga, y estos tres años han sido una gran ayuda para crecer y para descubrir quién soy. Born This Way fue la cúspide de lo que podía pedir de ella. La letra me marcó y me motivó a seguir siendo fuerte. Puede que mi historia no sea trágica, pero lo hubiera sido si Gaga no hubiera aparecido en mi vida, porque me hubiera quedado oculto en las sombras, siendo negativo y pensando en odiar a todos. También aprendí a aceptarme como soy, aceptar mis errores, pero siempre buscando mejorar. Así que, ¡Gracias, Mo†her! Porque gracias a tu valentía, yo soy valiente.